El comercio de Ciudad Real empieza a recuperar ventas

El IMPEFE desarrolla un documento en el que analiza casi un año para concluir que, sin haber recuperado los datos previos al COVID, la estabilidad se asienta en el sector.

La desaparición de muchos locales comerciales, los carteles de ‘Liquidación’, ‘Se alquila’ o el cierre de negocios han sido una de las consecuencias más visibles de la crisis. El comercio ha sido uno de los sectores más golpeados, con una situación que empieza a revertirse con una fecha concreta en la capital: el final del estado de alarma.

Esta es una de las conclusiones que se obtiene del estudio Geomarket desarrollado por el Impefe. Una prospección de datos estadísticos que se ha realizado en cinco tandas: octubre y noviembre de 2020, así como febrero, abril y junio de 2021. En sus informes se revela una situación de caída drástica de las cifras del comercio, de los 1.504 que hubo al cierre del pasado año en la capital, a los 1.322 que se contabilizaron en febrero de 2021. Tras tocar ese suelo, las cifras se recuperan en el último documento, publicado hace unos días en el que se indica que son 1.472 los comercios. El análisis avanza un paso más y analiza la facturación aportada por los comercios. En este caso es clave la situación que había en el informe de febrero, el suelo, y junio, el momento de expansión actual, donde se muestra que el final del estado de alarma ha sentado bien al comercio creciendo tanto los que tienen facturación positiva, 278 frente a 201; como los que tienen estabilidad en sus cuentas, 1.043 a 1.000. El problema es que hay más comercios ahora que en febrero que tienen resultados negativos, 162 frente a 121. Con esta situación, el documento señala que ahora mismo en Ciudad Real hay 137 comercios en riesgo alto de desaparecer, dos más que a inicios de este 2021, aunque menos de los 156 que había al cierre de 2020.

Más locales, más comercios

«Los comercios que han estado funcionando y siguen funcionando son los dedicados al textil hogar», expuso el presidente de la Asociación Intersectorial de Autónomos en la provincia, Miguel Ángel Rivero, quien cree que ha habido un incremento en las ventas para acondicionar el hogar, como lo ha habido en los alimentos todo el tiempo del COVID. El problema, dijo, sigue estando en el comercio textil, muy tocado por la pandemia, y que, «ni con rebajas, se están recuperando». Lo que advirtió Rivero es que hay muchas personas que se han lanzado al comercio tras el paro y el problema es que se abren comercios con una viabilidad que no supera en muchos casos «el año o año y medio». «Cuando se les acaba el préstamo del banco o la ayuda de su familia» llega al cierre, lo que muestra que pueden aumentar la cifra de establecimientos, pero «el problema no está en establecerse, sino en perdurar». Para lograrlo, recordó que es necesario realizar estudios estratégicos y planes, siendo clave conservar el comercio existente, necesario para mantener el empleo.

Para el presidente del Impefe, Pedro Maroto, hay «una reactivación del ámbito comercial y hablando con urbanismo se ha detectado una reactivación de reformas de locales». El edil expuso que no se pueden recuperar los datos que había antes de la pandemia, al ritmo en que se ha perdido, como ocurre con las cifras del paro, pero hay visos de una recuperación, con zonas como la nueva peatonalización de calle Toledo y Calatrava o Alfonso X, con nuevos establecimientos. Así se mostrará en el próximo conteo de locales vacíos que el Consistorio ya está realizando y que presentará a finales de julio.

 

Fuente: La Tribuna