En una nueva entrega del espacio Emprendedores en la Onda, la concejala de Empleo y Desarrollo Local del Ayuntamiento de Alicante, Sonia Tirado, calificó este martes como “positivo” el balance de su departamento durante 2016, al afirmar que “ha sido un año de mucho trabajo y también de muchos resultados”.
Tirado destacó lo que considera un “giro radical” en el Centro de Emprendedores, “tanto en la organización de las actividades, como en su contenido”, tras establecer “unas prioridades en función de determinados sectores económicos y grupos de población”. Asimismo, apuntó que, desde enero, por esta sede “han pasado más de 1.600 asistentes” a los diferentes actos.
Sobre la nueva programación cuatrimestral, Tirado anunció que “la estructura se mantiene”, si bien uno de los objetivos en 2017 será apoyar no solo la puesta en marcha, sino también el crecimiento de los proyectos emprendedores ya iniciados, en referencia a “aquellas empresas que quieren ampliar, diversificar o salir afuera”.
La edil también hizo mención al convenio suscrito con el Programa Lanzadera, respaldado por el empresario Juan Roig, para colaborar en actividades formativas y ampliar las opciones de financiación a los emprendedores alicantinos. También se felicitó por la presentación del nuevo Plan de Garantía Juvenil, con 900.000€ en formación y ayudas. “El objetivo es que los jóvenes puedan aportar a la empresa el conocimiento que ésta no tiene. Y, a partir de ahí, generar una relación laboral de calidad”, aseguró.
Comunicación Ética, una perspectiva diferente
En el apartado dedicado a emprendedores, el protagonismo fue para Comunicación Ética, un proyecto de Ana Sempere y Elena Hernández, dos publicistas que trabajan para empresas socialmente responsables con la aspiración de “cambiar las cosas”.
En palabras de una de sus fundadoras, se trata de un proyecto que “surge del inconformismo”, cuando, tras haberse titulado, ambas compartían la inquietud por “hacer algo distinto”, fuera del perfil habitual de otras agencias. De esta forma nació su joven empresa, con el fin de desarrollar modelos comunicativos basados en la economía del bien común, a través de valores como la transparencia o el respeto al medio ambiente.
Sempere y Hernández reconocen cierto rigor a la hora de filtrar sus clientes. “No queremos vender humo. Entendemos que la comunicación es importante, pero también lo es la empresa y lo que hay detrás”, por lo que exigen “unos valores y una conciencia para trabajar juntos”.
Asimismo, ambas emprendedoras dedicaron unas palabras de aliento hacia quienes se plantean poner en marcha una nueva idea de negocio: “Cualquier persona tiene un valor en sí misma. Aquellos que todavía no han dado el paso, que lo den. A nosotras nos ha costado, pero todo es empezar”, sentencian.
Haz clic AQUÍ para escuchar el audio del programa.