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El ayuntamiento de Madrid ha presentado públicamente su Estrategia para la Economía Social y Solidaria, mediante una serie de mesas redondas, conferencias y rondas empresariales, que se han desarrollado en dos jornadas los días 9 y 10 de octubre en Medialab Prado.
Una de las mesas de las jornadas ha reunido a representantes de la administración central (Directora General de Trabajo Autónomo y de la Economía Social), y de comunidades (Comunidad de Madrid, Andalucía, Baleares y Navarra).
También ha tenido lugar un encuentro de representantes de las cuatro mayores ciudades españolas (Madrid, Barcelona, Valencia y Sevilla), donde se han contrastado los respectivos instrumentos puestos en marcha para el desarrollo de una economía sostenible e inclusiva a través del fomento de la Economía Social y Solidaria.
Con todo, el mayor peso de las jornadas ha recaído en el propio tejido productivo de la Economía Social, que ha contado con una mesa redonda en la que los representantes de las asociaciones empresariales han departido sobre el papel y oportunidades que se presenta para las empresas.
En otra de las mesas, han participado cinco conocidas empresas del sector. Una de ellas es el mayor grupo industrial de España, el grupo Mondragón, que en Madrid cuenta con el centro LEINN, de su universidad, el de mayor excelencia en formación de emprendimiento. Otra es Helechos, de Leganés, la mayor empresa de la comunidad en jardinería. También ha participado Gredos San Diego, con sede en Vallecas, y que es la empresa con mayor número de colegios en Madrid. Todas ellas son cooperativas. También ha estado Coopera, una empresa de Cáritas que trabaja la inserción social desde el sector del reciclaje. También ha participado una Sociedad Laboral, Serenos de Gijón, en lo que sería un ejemplo peculiar en el sector del acompañamiento a la vecindad.
También se ha realizado una ronda de presentaciones donde una decena de nuevos proyectos han comentado los retos a los que se han enfrentado, como los han superado y las perspectivas que se les presentan.
Por su parte, el Ayuntamiento de Madrid, ha expuesto buena parte de las numerosas herramientas que, en los últimos años, ha puesto a disposición del sector para un desarrollo más integral. Comentando desde las subvenciones a nuevos proyectos, proyectos pilotos e intercooperación; los diferentes mecanismos de apoyo financiero (créditos blandos, microcréditos, avales); los proyectos de innovación social, como el proyecto MARES; la medidas en materia de contratación pública; en materia de consumo responsable, hasta las diferentes actuaciones de participación e interlocución con agentes y ciudadanía.
Y todo en el marco de la presentación de la Estrategia Municipal de Economía Social y Solidaria. Una estrategia que se ha construido a lo largo de casi tres años de trabajo mediante la participación de asociaciones, empresas, administraciones y la propia ciudadanía, en un proceso único hasta ahora. En el que los madrileños que lo desearon llegaron a poder votar todas y cada una de las diferentes acciones propuestas, a través de Madrid Decide, y proponer las suyas propias para que también los ciudadanos se pronunciasen, con el compromiso de seleccionar las más votadas.
Un proceso que ha dado lugar a una completa estrategia articulada en torno a cuatro ejes (creación de ecosistemas territoriales, situar a la economía social en el centro de la acción municipal, generar conocimiento e innovación, y generar un sistema integral para la creación y fortalecimiento de empresas de la economía social). Ejes que se desarrollan mediante dieciocho líneas de actuación, que se concretan en 69 acciones diferentes.
De las dieciocho líneas de actuación, nueve de ellas, ya disponía de presupuesto comprometido para 2018 y 2019, situándose en casi seis millones de euros (5.889.546). A este importe habrían de añadirse los 30 que ya están previstos para este mismo 2018 en el marco de la línea de Inversión Municipal en proyectos de alto impacto social. En total casi 36 millones ya comprometidos, sin contar que algunas de las líneas no cuantificadas, como la de compra pública responsable, conllevarán también un importante contenido económico.
Y todo ello en lo que es una apuesta por una forma de producción, el de la Economía Social, en el que valores como la primacía de las personas y el objeto social sobre el capital, la gobernanza democrática y/o participativa, la reinversión de la mayoría de los beneficios para asegurar la sostenibilidad a largo plazo de la empresa, la prestación de servicios a sus miembros y a las comunidades locales, contribuyen activamente a la cohesión social y, por tanto, a un crecimiento innovador, inteligente, sostenible e integrador, además de a la creación de empleo de calidad en Europa. Un modelo de producción que contribuya a reequilibrar unas dinámicas económicas que, pese al poderoso dinamismo y niveles records que está logrando, mantienen unas condiciones laborales de retribuciones decrecientes, mayor temporalidad y parcialidad del trabajo, y un desempleo cada vez menos asistido.
Estrategia Municipal de Economía Social y Solidaria del Ayuntamiento de Madrid 2018-2025
